¿Qué es la cerámica cusqueña?

Artesanías de Cusco: Plata, Cerámica y Más

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Cusco, ombligo del mundo inca y corazón del encuentro cultural, no solo deslumbra con sus imponentes ruinas y paisajes de ensueño, sino también con un vibrante universo de artesanías que cuentan historias milenarias. Cada pieza, elaborada con esmero por manos expertas, es un testimonio de la rica herencia cultural de la región, fusionando técnicas ancestrales con influencias coloniales para crear objetos de belleza incomparable. Adquirir una artesanía cusqueña es llevarse consigo un pedazo del alma de este mágico lugar, apoyando además la economía de muchas familias que mantienen viva esta tradición.

La diversidad de la artesanía cusqueña es asombrosa, abarcando desde textiles llenos de simbolismo hasta delicadas piezas de cerámica y metal. Estos trabajos no son meros adornos; son expresiones artísticas profundas que reflejan la cosmovisión andina, la vida cotidiana y la religiosidad, tanto prehispánica como la introducida durante la colonia.

¿Qué es la cusqueña dorada?
CUSQUEÑA CERVEZA. dorada. golden lager. Hecha de 100% pura malta, lúpulo Saaz y un triple filtrado, que luego de seguir un delicado proceso de elaboración, dan como resultado el exquisito sabor, aroma fino y perfecto color dorado intenso de una cerveza única.
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Un Recorrido por las Artesanías Típicas de Cusco

La oferta artesanal en Cusco es amplia y variada. Cada tipo de artesanía tiene sus propias características, materiales y técnicas que la hacen única. Entre las más destacadas se encuentran la textilería, la alfarería y cerámica, el tallado en madera, la platería y la cerería. Explorar estas diferentes manifestaciones artísticas es una forma de adentrarse en la identidad cultural de Cusco.

Textilería Cusqueña: Hilos que Cuentan Historias

Los tejidos andinos son, en esencia, un lenguaje. Cada color, cada forma geométrica, cada símbolo plasmado en un tejido cusqueño posee un significado profundo, funcionando como un libro abierto que narra la historia, las creencias y la cosmología de la cultura inca y las comunidades que la sucedieron. Las técnicas de tejido, a menudo heredadas de generación en generación, son complejas y laboriosas, utilizando fibras naturales como la lana de alpaca y tintes obtenidos de plantas y minerales.

Estos tejidos no solo se manifiestan en prendas de vestir tradicionales, como ponchos y mantas, sino también en tapices, chuspas (bolsas para la coca) y otros objetos decorativos. La maestría de los tejedores cusqueños se aprecia en la precisión de los diseños y la vibrante paleta de colores que emplean, haciendo de cada pieza una verdadera obra de arte textil.

Alfarería y Cerámica Cusqueña: La Fusión de Dos Mundos

La cerámica es una de las expresiones artísticas más antiguas de los Andes peruanos, con raíces que se remontan a miles de años antes de los Incas. La alfarería incaica se caracterizaba por el uso de arcilla con fondos predominantemente oscuros, en tonos marrones y rojizos, y decoraciones que a menudo representaban motivos agrícolas, religiosos o ceremoniales. Era fundamental en la vida cotidiana y en los rituales sagrados, especialmente en las ofrendas a la Pachamama (Madre Tierra).

Con la llegada de los españoles, se produjo una transformación fascinante. Los artesanos españoles introdujeron nuevas técnicas, como el envidriado y el enlozado, que permitían obtener fondos blancos y brillantes. Esta técnica se fusionó con los conocimientos ancestrales de los ceramistas incaicos, dando origen a la cerámica cusqueña colonial. Esta nueva forma de arte combinaba los fondos blancos y relucientes con una rica variedad de diseños, tanto de inspiración europea (ángeles, vírgenes, caballos, toros) como andina (aves, flores, escenas rurales, motivos geométricos y religiosos). La característica distintiva de esta cerámica es su dibujo libre y expresivo, con colores intensos y hermosos que la hacen inconfundible.

La localidad de Raqchi, al sur de Cusco, es uno de los centros alfareros más importantes de la región. Sus artesanos conservan técnicas milenarias y producen piezas que son muy apreciadas por los visitantes. Comprar cerámica en Raqchi no solo es adquirir una pieza única, sino también apoyar directamente a las comunidades que mantienen viva esta tradición.

¿Dónde se creó la cusqueña?
El 1 de octubre de 1908 Ernesto Günther y un grupo de hombres emprendedores fundó en la ciudad del Cusco, una sucursal de la Cervecería Alemana Günther & Tidow S.A. Ltda., la cual ya operaba en Arequipa desde hacía 10 años atrás; la misma que tenía en su portafolio, entre otras cervezas: Pilsener Bier Cuzco ( ...

Platería Cusqueña: El Oro de los Incas en Metal Precioso

La platería cusqueña es quizás una de las artesanías que mejor ejemplifica la rica fusión cultural de la región. Combina la sofisticación de los motivos prehispánicos, que a menudo incluían representaciones zoomorfas (animales) y formas geométricas, con la elegancia y las técnicas del arte colonial español. Esta simbiosis dio lugar a piezas únicas que reflejan la historia y la identidad de Cusco.

El material principal utilizado en la elaboración de estas joyas y objetos ornamentales es la plata, aunque también se emplea el bronce. Los artesanos plateros de Cusco crean una amplia gama de productos, desde delicados collares y pulseras hasta anillos elaborados y, de manera muy particular, los tradicionales tupus o alfileres. Estos alfileres, que en la época inca eran utilizados por las mujeres para sujetar sus mantas, siguen siendo elaborados hoy en día, a menudo con diseños inspirados en los originales, como aves o figuras simbólicas.

Recorrer los museos de Cusco permite apreciar la maestría de los antiguos plateros y entender la continuidad de estas técnicas a lo largo del tiempo. Las tiendas de artesanías en Cusco y el Valle Sagrado son excelentes lugares para encontrar piezas de platería, que varían desde reproducciones de diseños antiguos hasta creaciones contemporáneas.

Tallado en Madera Cusqueña: Detalle y Elegancia

El tallado en madera es otro oficio artesanal de gran tradición en Cusco. Los artesanos madereros transforman maderas nobles como el cedro y la caoba en verdaderas obras de arte. Los productos resultantes son variados y van desde muebles finamente elaborados y marcos de espejos o cuadros, hasta retablos religiosos y diversos objetos ornamentales.

Uno de los elementos arquitectónicos y decorativos más solicitados son los balcones ornamentales, que recuerdan la arquitectura colonial de la ciudad. El barrio tradicional de San Blas, conocido por albergar talleres de artistas y artesanos, es un lugar ideal para encontrar talleres de tallado en madera y adquirir estas piezas. La técnica del pan de oro, que consiste en recubrir la madera tallada con finas láminas de oro, es también muy utilizada en retablos e iglesias, añadiendo un toque de opulencia y sacralidad.

Cerería Cusqueña: Luz y Aroma con Tradición

Aunque menos conocida a nivel internacional que la platería o la textilería, la cerería o arte de hacer velas, también ocupa un lugar importante en la artesanía cusqueña, especialmente en el ámbito religioso y decorativo. Las velas cusqueñas se caracterizan por su gran variedad de tamaños, formas y diseños.

Estas velas a menudo son elaboradas de forma artesanal, con detalles intrincados y, en algunos casos, con aromas incorporados. Se pueden encontrar velas para uso ceremonial, decorativo o simplemente para ambientar espacios. La calle Meloq, a poca distancia de la Plaza de Armas de Cusco, es uno de los puntos de referencia para encontrar tiendas dedicadas a la elaboración y venta de estas particulares velas.

¿Por qué es famosa Cusco, Perú?
En 1983, Cusco fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO con el título de "Ciudad del Cusco". Se ha convertido en un importante destino turístico, con más de dos millones de visitantes al año y acceso a numerosas ruinas incas, como Machu Picchu, una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno, y muchas otras.

La Importancia de la Artesanía en Cusco

Más allá de su valor estético y cultural, la artesanía juega un papel crucial en la economía local de Cusco. Muchas familias, tanto en la ciudad como en comunidades rurales del Valle Sagrado y otras áreas, dependen de la producción y venta de estas artesanías para su sustento. Al comprar directamente a los artesanos o en tiendas que los apoyan de manera justa, los visitantes contribuyen significativamente a la preservación de estas tradiciones y al bienestar de las comunidades.

Tabla Comparativa de Artesanías Cusqueñas

ArtesaníaMateriales PrincipalesCaracterísticas DestacadasEjemplos de Productos
TextileríaLana (alpaca, oveja), fibras naturales, tintes naturalesDiseños simbólicos, colores vibrantes, técnicas ancestrales de tejidoPonchos, mantas, tapices, chuspas
Alfarería/CerámicaArcilla, engobes, esmaltes (colonial)Fusión Inca-Colonial, fondos oscuros (Inca) o blancos (Colonial), diseños variados (andinos y españoles)Vasijas, platos, tazas, figuras, retablos de cerámica
PlateríaPlata, bronceCombinación de motivos prehispánicos (zoomorfos) y coloniales, técnicas de orfebreríaTupus, collares, pulseras, anillos, objetos ornamentales
Tallado en MaderaCedro, caobaDetalle en relieve, aplicación de pan de oro, influencias arquitectónicas y religiosasMuebles, marcos, retablos, balcones ornamentales
CereríaCeraVariedad de tamaños y formas, diseños detallados, velas aromáticasVelas ceremoniales, decorativas, aromáticas

Preguntas Frecuentes sobre Artesanías en Cusco

¿Dónde puedo comprar artesanías auténticas en Cusco?

Los mejores lugares para encontrar artesanías auténticas son directamente en los talleres de los artesanos, especialmente en barrios como San Blas, o en mercados artesanales y ferias locales. Localidades como Raqchi (para cerámica) o ciertas calles especializadas (Meloq para cerería) también son excelentes opciones. Siempre es recomendable preguntar sobre el origen de la pieza y, si es posible, comprar directamente a quienes la elaboraron.

¿Qué es un tupu en la platería cusqueña?

Un tupu es un alfiler grande y decorado, tradicionalmente utilizado por las mujeres andinas para sujetar sus mantas o llicllas. En la época inca y colonial, los tupus eran a menudo elaborados en plata o bronce, con diseños que podían incluir figuras de animales, flores o motivos geométricos. Hoy en día, siguen siendo una pieza emblemática de la platería cusqueña.

¿Cuál es la diferencia entre la cerámica Inca y la cerámica cusqueña colonial?

La cerámica inca se caracterizaba por el uso de arcilla natural que resultaba en fondos oscuros (marrones, rojizos) y decoraciones incisas o pintadas con pigmentos terrosos. La cerámica cusqueña colonial, por otro lado, es el resultado de la fusión con técnicas españolas como el envidriado y enlozado, que permiten obtener un fondo blanco y brillante, sobre el cual se pintan diseños que mezclan motivos andinos y europeos con colores vivos.

¿Las artesanías cusqueñas tienen algún significado especial?

Sí, muchas artesanías cusqueñas están cargadas de simbolismo. Los tejidos, por ejemplo, son verdaderos códigos visuales que representan la cosmovisión andina. Las figuras en cerámica o platería a menudo tienen significados religiosos, mitológicos o relacionados con la naturaleza y la vida rural. Comprar una artesanía conociendo su significado añade una capa adicional de aprecio por la pieza.

La artesanía de Cusco es un reflejo vivo de su historia, su gente y su entorno. Cada pieza es un tesoro que guarda en sí la sabiduría de generaciones de artesanos, la riqueza de dos culturas que se encontraron y la belleza inigualable de los Andes peruanos. Explorar y adquirir estas obras de arte es una experiencia enriquecedora que permite conectar de manera profunda con el legado cultural de esta fascinante región.

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Alberto Calatrava

Nací en la Ciudad de Buenos Aires en 1956, en un entorno donde el arte y la artesanía se entrelazaban con la vida cotidiana. Mi viaje en la platería comenzó en el taller de Don Edgard Michaelsen, un maestro que me introdujo en las técnicas ancestrales de la platería hispanoamericana, herederas de siglos de tradición colonial. Allí, entre martillos y limaduras de plata, descubrí que el metal no era solo un material, sino un lenguaje capaz de expresar historias, culturas y emociones. Complemé mi formación como discípulo del maestro orfebre Emilio Patarca y del escultor Walter Gavito, quien me enseñó a ver la anatomía de las formas a través del dibujo y la escultura. Esta fusión entre orfebrería y escultura definió mi estilo: una búsqueda constante por capturar la esencia viva de la naturaleza en piezas funcionales, como sahumadores, mates o empuñaduras de bastones, donde animales como teros, mulitas o ciervos se convertían en protagonistas metálicos.Mis obras, forjadas en plata 925 y oro de 18 quilates, no solo habitan en colecciones privadas, sino que también forman parte del patrimonio del Museo Nacional de Arte Decorativo de Buenos Aires. Cada pieza nace de un proceso meticuloso: primero, estudiar las proporciones y movimientos del animal elegido; luego, modelar sus partes por separado —patas, cabeza, tronco— y finalmente unirlas mediante soldaduras invisibles, como si el metal respirara. Esta técnica, que combina precisión técnica y sensibilidad artística, me llevó a exponer en espacios emblemáticos como el Palais de Glace, el Museo Histórico del Norte en Salta y hasta en Miami, donde el arte argentino dialogó con coleccionistas internacionales.En 2002, decidí abrir las puertas de mi taller para enseñar este oficio, no como un mero conjunto de técnicas, sino como un legado cultural. Impartí seminarios en Potosí, Bolivia, y en Catamarca, donde colaboré con el Ministerio de Educación para formar a nuevos maestros plateros, asegurando que la tradición no se perdiera en la era industrial. Sin embargo, mi camino dio un giro inesperado al explorar el poder terapéutico del sonido. Inspirado por prácticas ancestrales del Himalaya, comencé a fabricar cuencos tibetanos y gongs usando una aleación de cobre y zinc, forjándolos a martillo con la misma dedicación que mis piezas de platería. Cada golpe, realizado con intención meditativa, no solo moldea el metal, sino que activa vibraciones capaces de inducir estados de calma profunda, una conexión entre el arte manual y la sanación espiritual.Hoy, desde mi taller Buda Orfebre, fusiono dos mundos: el de la platería criolla, arraigada en la identidad gaucha, y el de los instrumentos sonoros, que resonan como puentes hacia lo intangible. Creo que el arte no debe limitarse a lo estético; debe ser un vehículo para transformar, ya sea a través de un sahumador que evoca la Pampa o de un cuenco cuyas ondas acarician el alma. Mi vida, como mis obras, es un testimonio de que las manos, guiadas por pasión y conciencia, pueden convertir el metal en poesía y el sonido en medicina.

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