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El Arte Milenario de la Orfebrería y Platería

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Desde tiempos inmemoriales, la humanidad ha sentido una atracción especial por los metales preciosos. El oro y la plata, con su brillo inherente y su maleabilidad, han sido la base de oficios que trascienden la mera utilidad para convertirse en verdaderas expresiones artísticas: la orfebrería y la platería. Estas disciplinas, aunque a menudo se confunden o se agrupan, tienen sus particularidades y una historia rica que se entrelaza con el desarrollo de las civilizaciones.

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El código postal 41008 es el de las calles del barrio de La Rosaleda, al suroeste del parque de Miraflores.

La orfebrería, centrada tradicionalmente en el trabajo del oro, y la platería, dedicada a la plata, comparten técnicas fundamentales pero difieren en las propiedades específicas de los metales que manipulan, lo que influye en los procesos y los resultados finales. Ambas requieren un dominio excepcional de herramientas, un conocimiento profundo de los materiales y, sobre todo, una paciencia y una visión artística que pocos oficios demandan.

Índice de Contenido

¿Qué es la Orfebrería? El Arte del Oro

La orfebrería es el arte de trabajar el oro y otras aleaciones de metales preciosos para crear objetos decorativos o utilitarios. Históricamente, ha estado ligada al poder, la realeza y lo sagrado. Las civilizaciones antiguas, como la egipcia, la micénica, la romana o la precolombina, dejaron un legado impresionante de piezas de orfebrería que hoy admiramos en museos de todo el mundo. El oro, por su resistencia a la corrosión y su brillo inalterable, simbolizaba la eternidad y la divinidad.

El orfebre trabaja con oro puro (24 quilates), que es muy blando, o con aleaciones de menor pureza (como 18k, 14k, 10k) que contienen otros metales como cobre, plata, níquel o zinc para aumentar su dureza y durabilidad, además de modificar su color (oro amarillo, blanco, rosa). La maleabilidad y ductilidad del oro son legendarias; puede ser laminado en hojas extremadamente finas (pan de oro) o estirado en hilos muy delgados.

¿Qué es la Platería? La Versatilidad de la Plata

La platería es el arte de trabajar la plata. Aunque históricamente menos valorada que el oro, la plata ha sido fundamental en la creación de objetos tanto suntuarios como cotidianos: desde vajillas y cuberterías finas hasta objetos religiosos, candelabros, bandejas y, por supuesto, joyería. La plata posee un brillo espectacular que, aunque susceptible al deslustre (tarnish), es fácilmente recuperable con limpieza adecuada.

La plata pura (99.9%) es también muy blanda para la mayoría de los usos. Por ello, se alea comúnmente con cobre para aumentar su dureza y resistencia. La aleación más conocida es la plata de ley o plata esterlina, que contiene 92.5% de plata y 7.5% de cobre (marcada a menudo con el sello 925). Otras aleaciones pueden variar ligeramente.

Técnicas Fundamentales Compartidas

Aunque los metales difieren, muchas de las técnicas empleadas por orfebres y plateros son las mismas, adaptadas a las propiedades específicas del material. Estas técnicas son el corazón del oficio:

  • Fundición: El metal se calienta hasta su punto de fusión y se vierte en moldes. La técnica de la cera perdida es una de las más antiguas y permite crear formas complejas.
  • Forja: Dar forma al metal golpeándolo con martillos sobre un yunque o tas. Permite endurecer el metal y crear volúmenes.
  • Laminado y Trefilado: Pasar el metal a través de rodillos (laminado) para obtener láminas de grosor deseado, o a través de orificios progresivamente más pequeños en una hilera (trefilado) para obtener hilos.
  • Soldadura: Unir piezas de metal mediante la fusión de un metal de aporte con un punto de fusión menor (soldadura). Requiere precisión y control del calor.
  • Cincelado y Repujado: El repujado consiste en trabajar el metal desde el reverso para crear un relieve en el anverso. El cincelado se realiza en el anverso para detallar, texturizar o perfilar el relieve o para crear grabados. Se utilizan cinceles y punzones.
  • Grabado: Crear diseños incidiendo líneas en la superficie del metal con buriles o herramientas rotatorias.
  • Filigrana: Técnica ornamental que utiliza hilos muy finos de metal, a menudo retorcidos, que se sueldan sobre una base metálica o se unen entre sí para formar intrincados encajes metálicos.
  • Engaste: Fijar piedras preciosas o semipreciosas en el metal utilizando diversas técnicas (bisel, garras, pavé, etc.).
  • Pulido: Proceso final para dar brillo a la superficie del metal, eliminando marcas de herramientas y arañazos.

Una Historia Brillante a Través de las Épocas

La historia de la orfebrería y la platería es un espejo de la historia humana. En el antiguo Egipto, el oro era el metal de los faraones y los dioses, utilizado en máscaras funerarias, sarcófagos y adornos rituales. Griegos y romanos destacaron en la creación de joyería y objetos de lujo en oro y plata.

Durante la Edad Media, la orfebrería tuvo un fuerte carácter religioso, creando relicarios, cálices, cruces y cubiertas de libros sagrados de una belleza y complejidad asombrosas. Las catedrales y monasterios encargaban piezas magníficas que aún hoy se conservan.

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El Renacimiento vio un florecimiento del arte secular, con orfebres como Benvenuto Cellini creando esculturas y objetos decorativos para cortes reales. Se perfeccionaron técnicas y se exploraron nuevos estilos.

En los siglos XVII y XVIII, la platería alcanzó un auge significativo, especialmente en Europa, con la producción masiva (aunque artesanal) de vajillas y objetos de decoración para la creciente burguesía y la nobleza. Estilos como el Barroco y el Rococó dejaron su huella en piezas ornamentadas y detalladas.

El siglo XIX trajo consigo la Revolución Industrial, que permitió la producción en serie de muchos objetos de metal. Sin embargo, la orfebrería y la platería artística sobrevivieron y se revalorizaron como oficios artesanales y artísticos frente a la estandarización industrial. Movimientos como el Art Nouveau y el Art Déco impulsaron nuevos diseños y usos del metal.

Hoy en día, el oficio sigue vivo. Los artesanos contemporáneos combinan técnicas tradicionales con tecnología moderna (como el diseño 3D o el corte láser) para crear piezas únicas, ya sean joyería de alta gama, objetos de arte o trabajos de restauración de patrimonio.

Diferencias Clave entre Orfebrería y Platería

Aunque comparten el mismo espíritu artesanal y muchas técnicas, las diferencias radican principalmente en el material y, a menudo, en la escala de las piezas:

CaracterísticaOrfebreríaPlatería
Metal PrincipalOro (y sus aleaciones)Plata (y sus aleaciones)
Valor IntrínsecoGeneralmente más altoGeneralmente más bajo que el oro
Punto de FusiónMás alto (aprox. 1064°C para oro puro)Más bajo (aprox. 961°C para plata pura)
Maleabilidad/DuctilidadMayor en oro puroAlta, pero menor que el oro puro
Resistencia a la CorrosiónMuy alta (no se oxida)Buena, pero se deslustra (sulfura)
Usos ComunesJoyería de alta gama, objetos religiosos, piezas artísticas suntuariasVajillas, cuberterías, objetos decorativos, joyería, objetos religiosos
Escala TípicaA menudo piezas más pequeñas (joyería), aunque también objetos grandesFrecuentemente objetos de mayor tamaño (bandejas, jarras, cuberterías)
CuidadoRequiere limpieza suaveRequiere limpieza específica para evitar/eliminar el deslustre

Es importante notar que la distinción no es siempre estricta; un orfebre puede trabajar plata y un platero puede trabajar oro, especialmente en la creación de joyería, que a menudo combina ambos metales.

El Valor de lo Hecho a Mano

En una era de producción masiva, las piezas de orfebrería y platería artesanal tienen un valor incalculable. Cada objeto es el resultado de horas de trabajo, habilidad, conocimiento y pasión. No hay dos piezas exactamente iguales. Poseer una obra de un orfebre o platero es tener un pedazo de historia, arte y dedicación.

Además del valor material de los metales preciosos, estas creaciones llevan consigo el valor artístico e histórico. Son inversiones que pueden durar generaciones, transmitiendo no solo belleza sino también historias y tradiciones familiares.

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Distrito Sur (Sevilla)SurPoblación• Total75 620 hab.• Densidad9883,44 hab./km²SedeC/ Jorge Guillén, 41013

Cuidado de Objetos de Oro y Plata

Para mantener la belleza de las piezas de orfebrería y platería, es fundamental cuidarlas adecuadamente:

  • Oro: Se limpia generalmente con agua tibia, un poco de jabón neutro y un cepillo suave. Enjuagar bien y secar con un paño suave. Evitar productos químicos agresivos.
  • Plata: La plata tiende a deslustrarse (ponerse oscura) debido a la reacción con el azufre presente en el aire. Se puede limpiar con paños específicos para pulir plata, líquidos limpiadores de plata (siguiendo estrictamente las instrucciones) o pastas. Es mejor prevenir el deslustre guardando las piezas en bolsas anti-tarnish o en lugares secos.
  • Ambos: Guardar las piezas individualmente para evitar arañazos. Evitar el contacto con perfumes, lociones, cloro y productos de limpieza.

Preguntas Frecuentes

A continuación, respondemos algunas dudas comunes sobre estos oficios:

¿Cuál es la diferencia entre orfebrería y joyería?

La orfebrería es un término más amplio que abarca el trabajo de metales preciosos para crear cualquier tipo de objeto, ya sea decorativo, utilitario o religioso. La joyería es una rama de la orfebrería (y a veces de la platería) que se centra específicamente en la creación de adornos personales (anillos, collares, pulseras, pendientes).

¿Qué significa el sello 925 en una pieza de plata?

El sello 925 indica que la pieza es de plata de ley o plata esterlina, lo que significa que contiene un 92.5% de plata pura y un 7.5% de otros metales, generalmente cobre. Es un estándar de calidad reconocido internacionalmente.

¿El oro blanco es oro real?

Sí, el oro blanco es oro real. Es una aleación de oro puro con metales blancos como el paladio, el níquel (en algunas aleaciones antiguas) o la plata. A menudo se le aplica un baño de rodio para aumentar su brillo y blancura.

¿Por qué la plata se pone negra?

La plata se oscurece o deslustra (tarnish) debido a una reacción química con compuestos de azufre presentes en el aire (como el sulfuro de hidrógeno). Esta reacción forma sulfuro de plata en la superficie, que es de color oscuro.

¿Es la orfebrería un oficio en peligro de extinción?

Aunque la producción industrial ha cambiado el panorama, la orfebrería y la platería artesanal siguen siendo oficios vivos, mantenidos por artesanos dedicados y valorados por quienes aprecian la calidad, el diseño único y el valor intrínseco de lo hecho a mano. Se adaptan a los nuevos tiempos y mercados.

Conclusión

La orfebrería y la platería representan una fusión magistral de arte, técnica e historia. Son oficios que requieren pericia, paciencia y una profunda conexión con la materia prima. Desde las sencillas herramientas del pasado hasta la tecnología moderna, los artesanos de los metales preciosos continúan una tradición milenaria, creando objetos de belleza perdurable y valor incalculable. Explorar este mundo es adentrarse en la historia del arte y la destreza humana, donde cada pieza cuenta una historia.

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Alberto Calatrava

Nací en la Ciudad de Buenos Aires en 1956, en un entorno donde el arte y la artesanía se entrelazaban con la vida cotidiana. Mi viaje en la platería comenzó en el taller de Don Edgard Michaelsen, un maestro que me introdujo en las técnicas ancestrales de la platería hispanoamericana, herederas de siglos de tradición colonial. Allí, entre martillos y limaduras de plata, descubrí que el metal no era solo un material, sino un lenguaje capaz de expresar historias, culturas y emociones. Complemé mi formación como discípulo del maestro orfebre Emilio Patarca y del escultor Walter Gavito, quien me enseñó a ver la anatomía de las formas a través del dibujo y la escultura. Esta fusión entre orfebrería y escultura definió mi estilo: una búsqueda constante por capturar la esencia viva de la naturaleza en piezas funcionales, como sahumadores, mates o empuñaduras de bastones, donde animales como teros, mulitas o ciervos se convertían en protagonistas metálicos.Mis obras, forjadas en plata 925 y oro de 18 quilates, no solo habitan en colecciones privadas, sino que también forman parte del patrimonio del Museo Nacional de Arte Decorativo de Buenos Aires. Cada pieza nace de un proceso meticuloso: primero, estudiar las proporciones y movimientos del animal elegido; luego, modelar sus partes por separado —patas, cabeza, tronco— y finalmente unirlas mediante soldaduras invisibles, como si el metal respirara. Esta técnica, que combina precisión técnica y sensibilidad artística, me llevó a exponer en espacios emblemáticos como el Palais de Glace, el Museo Histórico del Norte en Salta y hasta en Miami, donde el arte argentino dialogó con coleccionistas internacionales.En 2002, decidí abrir las puertas de mi taller para enseñar este oficio, no como un mero conjunto de técnicas, sino como un legado cultural. Impartí seminarios en Potosí, Bolivia, y en Catamarca, donde colaboré con el Ministerio de Educación para formar a nuevos maestros plateros, asegurando que la tradición no se perdiera en la era industrial. Sin embargo, mi camino dio un giro inesperado al explorar el poder terapéutico del sonido. Inspirado por prácticas ancestrales del Himalaya, comencé a fabricar cuencos tibetanos y gongs usando una aleación de cobre y zinc, forjándolos a martillo con la misma dedicación que mis piezas de platería. Cada golpe, realizado con intención meditativa, no solo moldea el metal, sino que activa vibraciones capaces de inducir estados de calma profunda, una conexión entre el arte manual y la sanación espiritual.Hoy, desde mi taller Buda Orfebre, fusiono dos mundos: el de la platería criolla, arraigada en la identidad gaucha, y el de los instrumentos sonoros, que resonan como puentes hacia lo intangible. Creo que el arte no debe limitarse a lo estético; debe ser un vehículo para transformar, ya sea a través de un sahumador que evoca la Pampa o de un cuenco cuyas ondas acarician el alma. Mi vida, como mis obras, es un testimonio de que las manos, guiadas por pasión y conciencia, pueden convertir el metal en poesía y el sonido en medicina.

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